La increíble historia de Creepy Creepers.

¡Hola, soy Pimiento! Reclamaciones de mi mote a Patata. Solo quiero decir que esta historia esta basada en el grupo, no tengo la intención de ofender a nadie. Habrá partes que se me irá la olla, lo siento xD

Pues hoy era un día normal, como todos los demás. Cada uno en su casa escribiendo por el grupo, acurrucados en la cama o viendo la tele en el sofá. En el grupo cada cual hablaba de su tema, era una casa de locos, pero después, un mensaje cambió todas las conversaciones. Ese mensaje lo había enviado Pato, la administradora del grupo:

-¡Eh chicos! He ganado la lotería y le he preguntado a mi madre si puedo dar un tour por España, ¿sabéis que me ha dicho? ¡Que si!

Todos hablaban a la vez por el grupo, había mas caos que antes, nadie sabía como parar esa locura.
Al rato, todos los componentes del grupo recibieron un e-mail un tanto extraño, redactaba la existencia de los portales espacio tridimensionales, y que se enviaría uno a cada persona del grupo.
Todos estaban eufóricos, y con la emoción del asunto sin pensarlo dos veces enviaron su dirección a la dirección de correo electrónico que salía en el e-mail.
Supuestamente a todos les llegaría el portal espacio tridimensional unos dos días después de enviar su dirección.

                                                              Dos días mas tarde.

 Todos estaban pasando fotos de sus portales espacio tridimensionales por el grupo, pero había un problema, que nadie sabia como utilizarlos.
Hasta que Pimiento, trasteando el portal, apareció de repente en la casa de Estantería (Sara de Castro).
Todos se quedaron alucinando, básicamente, no se lo creían. Hasta que Dani, apareció a lado de Mariona, que en ese momento estaba en un zoo.
En ese momento se dieron cuenta de que era posible transportarse al lado de la persona que poseía otro portal espacio tridimesional.

Todos se pusieron de acuerdo para que alguien fuera a una plaza grande, y todos nos teletransportamos a ahi sin problemas. Porque si nos teletransportáramos todos a la misma vez a una casa, moriríamos ahogados.
Pues ese mismo 2 de Julio de 2014, todos los Creepy Creepers se teletransportaron a Las Ramblas, en Barcelona.
En cuanto aparecieron todos, Pato pasó lista y... (CHAN CHAN) ¡FALTABA PATATA!
Nadie sabía donde podría estar. Si, bueno, se podía haber retrasado un poco en la teletransportación, pero ella es la primera que dijo lo de teletransportarse a ese sitio, además, habría avisado de que no podría ir.

Encontramos un papelito, y lo unico que ponía era:

.:..::.::pUtA biDA tETe::..:::.

-Patata, 2014-

Todos sabíamos que eso no daría ninguna pista a poder encontrarla, pero de repente apareció un unicornio listo, y dijo:

-Hhm... Si cambiamos las letras de orden y añadimos algunas iguales, podemos deducir este mensaje:

Patata abdica al tete.

Así que, abdicaba al tete, nadie sabe a quien se refiere con "el tete".
PEEEEEEEEEEERO, si había una posibilidad, cambiar el género:

Patata abdica a la teta.

Así habían menos posibilidades de averiguar quien era, porque la mayoría de Creepy Creepers son chicas.
Dado a que la mas chunga es Lara (también conocida como Dory o la chunga) la llaman Teta.
*ai temsion*

Todos empezaron a investigar a Lara, llegó a un punto en el que alguno la empezaba a oler, y eso delata mucho la investigación.
Bueno, al final todos murieron.

Fin.

¿Eh? Esto está mal, lo tachamos y ya está.

Fin.


Bueno, os sigo explicando lo que pasó.
Pues todos vivieron juntos y siguieron con la investigación a Lara. Siempre estaba ocupada con algo, si no era en el baño, era en su cuarto. (Si, vivíamos en una casa de 8 plantas)
¡Pero ja! Lara nos había tendido una trampa, y ahora estábamos todos en un universo paralelo, cosa que no funcionó a su bien, porque ahí estaba Patata y pudimos llevarnosla con nuestros portales espacio tridimensionales.

Lara fue excluida del grupo y nadie nunca mas la volvió a hablar.
Los demás vivíamos a ratos en una casa que teníamos en BCN. Íbamos unas 4 veces por semana, ya que eran vacaciones de verano. Los que eran pareja, intentaban ir todo lo que podían, por no decir los 7 días de la semana.
Y así, todos los Creepy Creepers, conseguimos vivir juntos y poder darnos esos abrazos que teníamos tantas ganas de darnos.

                                                              Fin.